lunes, 4 de abril de 2011

SUEÑOS (1)

...repentinamente estaba ahi parado, con un sonido que variaba en intensidad, pero incesante. Era como un golpeteo de infinitas particulas pequeñas que se agolpan en los oidos y que al mismo tiempo no pemiten permanecer con los ojos abiertos. Al frente sentía el enorme desierto que se perdia hasta donde mi vista podía llegar, lo habia visto antes. Sabia que estaba parado sobre un terreno vacio. Tenia en la mente como el azul del cielo y el ocre del suelo eran tan infinitos, solo separados por la linea del horizonte.

Y a pesar de eso, no sentía desesperación, no me sentía perdido, no me sentía mal.

Una enorme paz, una luz que se filtraba por mis parpados, plenitud y felicidad.

Si bien es cierto, cuando escucho la palabra felicidad, mi mente la relaciona con unas vacaciones, con el sol, el mar, tal vez con ir al cine, comer en un restaurante bonito, estar sano, percibir la energia y los colores de todo lo que tiene el universo para nosotros.

Pero esta vez era diferente, se trataba de sentir al interior la felicidad. No venia de una imagen por los ojos, por los aromas o los colores, ni siquiera por el tacto.

Era la paz. Equilibrio. El universo dentro de mi.


1 comentario:

  1. la paz interior y estar biien con uno siempre siempre, te ayudará a ver mejor lo que está afuera... y sobre todo a valorarlo...

    no hay ´sabor más dulce ni vista más agradable que lograr paz y equilibrio para con uno mismo y poder transmitirlo a tu entorno...

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